¡Hola a tod@s! Por la situación de Pandemia, no habéis podido visitar el aula de vuestros hijos. A través de varias entradas, que iré publicando a lo largo del curso, os iré mostrando nuestro Aula, y los distintos rincones de la misma.
Hoy, quiero mostraros uno de los rincones favoritos de los peques: "el rincón de la Paz".
Ante todo, quiero dejar claro, que no es un rincón de castigo. Es un rincón de recogimiento, y de resolución de conflictos. Los niños/as, acuden a él por propia iniciativa: cuando se sienten tristes, nerviosos, cuando necesitan estar solos, y también acuden acompañados cuando necesitan resolver un conflicto con un compañero/a.
Ahora vamos a ver de todo lo que consta el rincón.
- En la bandeja de color verde tenemos los siguientes objetos:
- Esfera de la calma:
Se trata de una esfera colorida que ayuda a los niños a respirar. Para calmarnos cogemos la esfera y cuando inspiramos abrimos la esfera, y cuando espiramos la cerramos lentamente.
2. Caleidoscopio:
Contamos con un pequeño caleidoscopio, pues observando sus colores y dibujos, es una manera de relajarnos.
3. Reloj de Arena.
Observar como cae la arena es otra manera de relajarnos y estar en el presente.
4. Laberinto.
5. Mandalas.
A algunas personas les relaja el colorear. Por ello, tengo en el rincón, una caja con pinturas y mandalas. Los que tengo ahora son con motivos de otoño.
6. Corazón antiestrés.
Aunque me he olvidado de fotografiarlo, contamos en la caja con un corazón antiestrés para apretar, que también nos sirve para resolver conflictos. La persona que tiene el corazón habla primero, y luego se lo cede a la otra persona para que también se exprese.
7. Caja de la Ira.
Sirve para gestionar enfados. La idea la saqué de la web "Guía Infantil". Primero, visionamos el cuento "Vaya Rabieta", que podéis ver en este vídeo:
A partir de este cuento, les dije que, una manera de hacer que nuestro "monstruo de la ira" se hiciera pequeñito, es dibujándolo como un borrón del color que quieran, pintarle ojos, piernas y pies y guardarlo en la caja de la ira, para que no pueda escapar. Así mismo les dije que cada vez que notáramos que nuestro enfado iba creciendo, en vez de hacerle daño a alguien o gritarle, podemos ir al rincón de la paz, dibujar nuestro monstruo y meterlo en la caja para que se haga pequeñito.
Nuestro rincón, además, está colocado al lado del rincón de la Biblioteca, porque leer, también puede relajarnos o hacernos sentir más felices.
Posiblemente, nuestro rincón vaya creciendo con elementos que nos hagan sentir relajados, felices, y centrados en el presente.
Espero que os haya gustado.¡ Hasta pronto! Un saludo:
Silvia
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