Halloween es ya una tradición importada que cada vez es más celebrada en nuestro país. Esto, no es algo indiferente para nuestros niños, los cuales se sienten atraídos por toda su carga mágica y lúdica.
He aprovechado este día, para trabajar los miedos. Para ello, los he sorprendido con un nuevo personaje: « El fantasma "Sin-Miedo"».
( La idea original la copié del blog "Aventura Diminuta". Si pincháis sobre la imagen del fantasma, os remitirá a dicho blog.)
El día 31 de Octubre, los niños se llevaron una gran sorpresa al descubrir sobre la pizarra a un nuevo amigo : el fantasma "Sin-Miedo". Fui preguntando a mis "peques", cuales eran las impresiones sobre este fantasma, si les parecía un fantasma malo o bueno. Aproveché el momento para preguntarles sobre sus miedos, e hicimos una lista en la pizarra. Distinguimos entre miedos reales, como el miedo a la oscuridad, o miedos no reales , como el miedo a los vampiros. Hablamos de que el miedo es necesario, ya que sirve para evitar peligros, como meter los dedos en un enchufe, o cruzar sin mirar. Pero tener miedo a los fantasmas o a las brujas, no tiene que atemorizarnos, porque no son reales. Esos son los miedos que le vamos a dar de comer al fantasma porque no los necesitamos.
Después de hablar sobre ello, los niños dibujaron sus miedos en un folio para luego dárselos de comer a Sin-Miedo.
Al final de la jornada, adornamos a nuestro fantasma con gomets, para que ya no diera tanto miedo.
Ha sido una experiencia preciosa y muy enriquecedora.
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