jueves, 5 de noviembre de 2020

Trabajamos las emociones

 


"De poco sirve que un niño sepa colocar neptuno en el Universo
 si luego no sabe dónde colocar su tristeza, su rabia o su miedo."

(José María Toro)



José María Toro, es una de las máximas referencias de nuestro país en Educación emocional. Coincido con este pedagogo en que la escuela no debe ser solo un lugar donde se aprendan las matemáticas, las letras y otros conocimientos, sino también un espacio donde se aprendan a gestionar conflictos, y a distinguir sus emociones y las de los demás. 

 La escuela, y hoy más que nunca, debe preparar para la vida. Opino que de nada sirve sacarse una matrícula de honor en cualquier carrera si luego, cuando tengas que trabajar, no sabes hacerlo en equipo, no sabes tolerar tu frustración, o tu rabia, ni comprendes la de tus compañeros, por poneros un ejemplo.

 Por ello, en mi aula, tiene mucho peso el Mindfulness y la educación Emocional, que ciertamente van de la mano. 

 Hoy, hemos comenzado a trabajar las emociones más en profundidad a través del cuento "El monstruo de colores" , de Anna LLenas


 Es un cuento muy conocido, pero para los que no lo conozcáis, trata sobre un monstruo que se ha hecho un lío con sus emociones y una niña le ayuda a ordenarlas.
 A través de este cuento se introduce a los pequeños en las emociones básicas: alegría, tristeza, miedo, rabia, amor y calma.

 Después de leer el libro, que les encanta, hemos hecho un par de actividades. 



1- La primera consistió en que yo les iba enseñando una de estas láminas, y ellos debían representar esa emoción. Por supuesto, ya que son muy pequeños, yo les ayudé. La verdad es que lo disfrutaron mucho saltando o dando palmas cuando salía la imagen de la alegría, lloriqueando de mentiras cuando salía la tristeza, etc.

2- La segunda actividad consistía en que yo dramatizaba una emoción y ellos debían señalarme en las láminas de cuál se trataba.
He de decir que lo hicieron verdaderamente bien, y que lo disfrutaron muchísimo. 

En próximos días les enseñaré la canción del monstruo de colores:



 Y es que yo no concibo mis clases sin un huequecito para trabajar Mindfulness y emociones. Por ello, aunque este año he tenido que renunciar a los rincones, tenemos en el aula un sitio para reflexionar, tranquilizarnos, resolver conflictos, o apartarnos un ratito si nos sentimos mal. Yo lo llamo "El rincón de la Paz", y aunque este año no he podido ponerlo tan bonito como otros años, pues he tenido que renunciar a cojines, alfombra, y otros elementos como la pelota antiestrés, el frasco de la calma, el peluche para abrazar, etc, contamos con él en clase y lo iremos poniendo muy acogedor para que sea un recurso más de nuestro aula.


 Siempre que puedo, hacemos algún ejercicio de Mindfulness, y cuento también con material como estos dos libros que nos ayudan a relajarnos:


"Respira" de Inês Castel-Branco, e "Imaginaciones" de Carolyn Clarke. Poquito a poco, con la distancia adecuada y sus mascarillas, los peques van cogiendo gusto al yoga y otros métodos de introspección. 
 
Os pongo dos sesiones de yoga que he llevado a cabo con ellos. Son sencillas, cortas y divertidas:




Pero el Mindfulness va mas allá. Como ejemplo, os recuerdo una entrada  que puse sobre ello hace unos días: http://elauladelaprofesilvia.blogspot.com/2020/10/algunos-ejercicios-de-mindfulness.html

Los peques lo hacen realmente bien. Estoy muy orgullosa. Y además les encanta.

Un saludo a tod@s:

Silvia


2 comentarios:

  1. Un componente imprescindible para intentar alcanzar la denominada "educación integral". Fantástico, gracias por compartir!!

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